Inmobiliarias hay muchas, como SIMCA Desarrollos ninguna.
Nuestro objetivo desde el nacimiento de la empresa ha sido claro: ofrecer las mejores oportunidades de inversión para quienes quieran sumarse a nuestra historia de éxito. Nuestra pasión, convertir cada proyecto inmobiliario en una pieza de arte habitacional. Aquí es donde arte, diseño y hacer negocios se conjugan. Hace 15 años incursionamos en el mercado de la hotelería en Playa del Carmen, cuando construimos nuestro primer hotel.
Siempre hemos estado atentos a nuestro entorno, y con el paso del tiempo detectamos una excelente oportunidad: la creciente demanda de propiedades vacacionales de lujo y su administración. Así empezó la segunda parte de nuestra historia, cuando comenzamos a diseñar, planear y construir edificios de departamentos de lujo en el Caribe. Han sido 14 años de crecer junto con el sureste: de aquí somos, aquí hemos vivido y en él hemos forjado nuestra historia.
Reconocimiento.
Nuestros desarrollos han recibido premios y reconocimientos no solo por su diseño arquitectónico sino por la calidad de los materiales y técnicas constructivas, ya que por lo regular ocupamos las mismas manos y materiales de nuestra cultura maya. Algunas cifras que nos respaldan:
- Más de 15 años de experiencia.
- Más de 30 desarrollos concluidos en tiempo y forma.
- Más de 1,700 clientes satisfechos.
Valor real.
Nosotros no especulamos en el precio de la tierra, pues vendemos a valor real y te garantizamos rendimientos porque precisamente la desarrollamos. Confiamos tanto en la capacidad de hacer crecer tu inversión que te ofrecemos seguridad a la hora de invertir, planes de pago y financiamiento, tipos de cambio preferenciales, y el respaldo de todo un equipo de profesionales. En nosotros encontrarás un aliado, un asesor inmobiliario de verdad, que constantemente está en busca de generar relaciones duraderas y crecer de la mano de sus clientes. Invertir y re invertir. Si quieres ser parte de nuestra historia, toda la familia SIMCA estamos para servirte. Tu prosperidad es la nuestra.